Bolivia impone restricciones en las compras en la frontera: de qué se trata

Esta medida golpea fuerte a los comerciantes salteños de frontera, ya que frena un intercambio comercial que en este momento les conviene a los bolivianos por la diferencia de cambio.

En la frontera caliente entre Aguas Blancas (Salta) y Bermejo (Bolivia), la situación está que arde. El interventor Adrián Zigarán salió a denunciar que las autoridades bolivianas están inventando restricciones para que sus ciudadanos no puedan cruzar a comprar mercadería del lado argentino.

El problema es simple: hoy, por la diferencia de cambio, a los bolivianos les resulta súper conveniente venir a comprar comestibles y otros productos a Salta. Esto había generado un respiro económico para los comerciantes salteños de frontera, que venían complicados.

Pero la alegría duró poco. Según Zigarán, la Policía Naval y la Aduana de Bolivia están actuando de manera que perjudica directamente el comercio.

Los límites que complican a Salta:

  • Tope de plata: Impusieron un límite de hasta 300 dólares para el paso de productos comprados en Argentina. Si gastás más, tenés problemas.
  • Restricción horaria: También pusieron un horario límite para pasar la mercadería, hasta las 13 horas, algo que complica a los "pasadores" o "corredores" que viven de ese trabajo.
  • Quita de mercadería: El interventor denunció que no solo ponen trabas, sino que a los bolivianos les están quitando la mercadería cuando intentan volver a su país.

 

"Hemos observado la implementación de límites de valor y restricciones para el paso de productos que circulan de manera fluida entre nuestros pueblos. Esta situación genera perjuicios económicos importantes, frena el desarrollo de la actividad comercial y afecta a cientos de familias que dependen de este intercambio diario", reza una nota que los comerciantes argentinos le mandaron al alcalde de Bermejo, Irineo Flores.

¿Qué significa esto para los vecinos, para Salta o para la zona? Significa que los comerciantes salteños, que venían recuperando algo de movimiento gracias a la llegada de compradores bolivianos, están viendo cómo se les corta el negocio por decisiones del otro lado de la frontera. Si esto sigue, peligra la fuente de ingresos de muchas familias que viven del comercio y del trabajo como pasadores.

La respuesta de Salta: "No nos vamos a dejar extorsionar"
Zigarán fue durísimo con las autoridades del país vecino, diciendo que no están a la altura de lo que el propio presidente boliviano pregona. Además, puso un ultimátum:

"No nos vamos a dejar extorsionar. Si no se calman, la semana que viene tendremos que aplicar la normativa vigente (que en Argentina también involucra restricciones), y los perjudicados van a ser ellos".

En paralelo, se conoció que hay movimientos políticos para sacar los controles bolivianos que están funcionando en territorio argentino. El concejal Fabián Gutiérrez adelantó que está armando un proyecto para que Migraciones y Aduana de Bolivia se retiren de nuestro país, específicamente de los controles integrados en el Puerto Chalanas y el Puente Internacional.

El edil se quejó de que es "injusto" que la Aduana Boliviana "imponga la agenda a los trabajadores correros", y le pongan límites a los comerciantes de Aguas Blancas. Consideró una locura que los controles migratorios y aduaneros bolivianos se hagan a "un kilometro y medio dentro de nuestro territorio nacional". Es un reclamo fuerte para que las autoridades nacionales tomen cartas en el asunto y dejen de ser rehenes de las decisiones de otro país en suelo salteño.